miércoles, 13 de mayo de 2009


La cultura de China es una de las más antiguas y complejas del mundo cuya civilización comprende una historia de más de 5.000 años. El país abarca una amplísima región geográfica con costumbres y tradiciones que varían enormemente entre pueblos, ciudades y provincias. La cultura china es un amplio término utilizado para describir las bases culturales, incluso entre regiones chino-hablantes fuera del continente chino. Su influencia ha abarcado los países de su entorno (Japón, Corea...), en términos de arquitectura, caligrafía, filosofía, etc.

Las Dinastías Primitivas: ♣♥



La tradición dice que los Xia (1994 a 1766 a. C.) fueron la primera dinastía china hereditaria, que sólo desapareció cuando fue expulsado su último gobernante debido al poder tiránico que ejerció sobre su pueblo. Sin embargo, no hay restos arqueológicos que confirmen esta historia; y la primera dinastía de la cual hay evidencias históricas es la Shang. El último monarca Shang, un tirano cruel y libertino, fue expulsado por un enérgico Zhou de un estado en el valle del río Wei.

La dinastía Shang (1766 a 1027 a. C.): ☺☻



La dinastía Shang gobernó en el territorio que ocupan las actuales provincias de Henan, Hubei, Shandong y la parte septentrional de Anhui, en el centro y norte de China. La capital, desde alrededor del 1384 a. C. en delante, estaba situada en Anyang cerca de la frontera norte de Henan. La economía estaba basada en la agricultura; se cultivaba trigo, cebada y posiblemente arroz. También se cuidaban gusanos de seda, y se criaban cerdos, perros, ovejas y bueyes. Se han encontrado recipientes de bronce, armas y otras herramientas, lo cual indica el conocimiento de la metalurgia y la existencia de artesanía. La sociedad creada por los Shang era aristocrática. Al frente estaba el rey, que presidía una nobleza militar y elegía a los gobernantes territoriales, que estaban obligados a ayudarle en sus empresas militares. Entre esta clase aristocrática y los plebeyos había un estrato sacerdotal culto que se ocupaba de los documentos de gobierno y era responsable de la adivinación. Los Shang adoraban a sus antepasados y a una multitud de dioses, el principal de los cuales era conocido como Shang Ti, el Señor en lo Alto.

La dinastía Zhou (1122 a 256 a. C.): ☺☻



Durante este periodo la civilización china se fue extendiendo gradualmente hacia el norte, ocupando el valle del río Yang-tse-Kiang. La amplia expansión por este territorio y el primitivo estado de las comunicaciones terrestres hicieron imposible que los Zhou ejercieran un control directo sobre toda la región; por lo tanto delegaron la autoridad en vasallos, cada uno de los cuales gobernaba por lo general sobre una ciudad amurallada y su territorio circundante. La jerarquía de estos estados de tipo feudal estaba encabezada por el señor, cargo que era hereditario; por debajo de él estaba la clase guerrera y en la base social se encontraban los campesinos y esclavos domésticos. Con el tiempo, estos estados vasallos se fueron haciendo cada vez más autónomos.

La sociedad Zhou estaba organizada alrededor de la producción agrícola. La tierra estaba dividida idealmente en extensiones cuadradas, cada una de las cuales se subdividía en nueve parcelas que formaban un espacio con forma de triángulo equilátero. Las ocho parcelas exteriores estaban asignadas a ocho familias campesinas, quienes unían sus esfuerzos y recursos para cultivar la parcela central propiedad de la clase dirigente. No está claro hasta qué extremo se utilizaba este sistema de distribución de tierras, pero las dinastías posteriores pensaron que era la manera más equitativa de dividir la tierra.

Los Han (206 a. C. a 9 d. C.): ☺☻



De los tumultos y estado de guerra que marcaron los últimos años de la dinastía Qin, destacó un dirigente de origen humilde, Liu Bang. Aplastó a otros pretendientes al trono y se proclamó a sí mismo emperador en el 206 a.C. La dinastía Han por él fundada sería la más duradera de la Era Imperial. Los Han se constituyeron sobre la base unificada que habían dejado los Qin, modificando la política que había conducido a suderrocamiento. Las leyes onerosas fueron suspendidas, los impuestos se redujeron sensiblemente y se adoptó una política favorecedora del comercio que permitió la recuperación económica. En principio Liu Bang concedió reinos hereditarios a algunos de sus aliados y familiares, pero hacia mediados del siglo II a.C. la mayor parte de estos reinos habían sido reintegrados y casi todo el territorio chino estaba bajo la jurisdicción del Imperio de los Han.

Una de las contribuciones más importantes de esta dinastía fue el establecimiento del Confucionismo como ideología oficial; sin embargo, en un intento por proporcionar una ideología completa al Imperio, los Han incorporaron al Confucionismo ideas de otras muchas escuelas filosóficas y emplearon supersticiones populares para incrementar las enseñanzas de Confucio. En el funcionamiento administrativo heredado de los Qin, los emperadores Han siguieron el principio confuciano de elegir a los hombres sobre la base del mérito más que por su nacimiento, siendo elegidos los más cualificados mediante exámenes escritos. A finales del siglo II a.C. se fundó una universidad imperial en la cual se formaban los futuros funcionarios o Mandarines en los cinco clásicos de la escuela confuciana.

La dinastía Qin (221-206 a C.): ☺☻



En el 221 a. C., el rey de Qin se autoproclamó Qin Shi Huangdi, o primer emperador de la dinastía Qin. El nombre "China" deriva de esta dinastía.

Con la ayuda de un ministro legalista, Li Si, el emperador unificó el mosaico de estados feudales en un imperio administrativamente centralizado y culturalmente unificado. Se abolieron las aristocracias hereditarias y sus territorios se dividieron en provincias gobernadas por burócratas nombrados por el emperador. La capital de Qin, cerca de la actual ciudad de Xi'an, se convirtió en la primera sede de la China Imperial. Se adoptó un sistema de escritura y su uso se hizo obligatorio en todo el Imperio. Para promocionar el comercio interno y la integración económica, los Qin unificaron los pesos y medidas y la acuñación de moneda. Se adoptó la propiedad privada de la tierra y se aplicaron leyes e impuestos con igualdad. La búsqueda de la uniformidad cultural llevó a los Qin a no legalizar muchas escuelas filosóficas que habían florecido a finales del último periodo Zhou. Sólo se dio la aprobación oficial a los legalistas y en el 213 a. C. se quemaron los libros de todas las otras escuelas, a excepción de los ejemplares que se guardaban en la biblioteca Imperial Qin.

El primer emperador también intentó extender las fronteras exteriores de China. En el sur sus ejércitos marcharon hacia el delta del río Rojo, lo que en la actualidad es Vietnam. En el sudoeste su dominio se extendió para englobar la mayor parte de las actuales provincias de Yunnan, Guizhou y Sichuan. En el noroeste sus conquistas alcanzaron Lanzhou, en la actual provincia de Gansu y el noreste, un sector de lo que hoy es Corea, reconoció la soberanía de los Qin. El centro de la civilización china, sin embargo, permaneció en el valle del
la pintura tradicional china serían el paisaje, flores y pájaros y las representaciones de figuras humanas de la primera época.

El elemento principal de la pintura china es la línea, rasgo que comparte con la caligrafía, lo que ha sido motivo de que ambas artes hayan estado estrechamente ligadas desde su origen. Durante la época de éxito de los pintores literatos en tiempos de la dinastía Yuan, los hombres de letras que se dedicaban a la pintura trataban intencionadamente de reafirmar más aún los lazos entre la caligrafía y a pintura, por lo que se volcaron en una tendencia que aunaba ambas disciplinas. Asimismo, la intensa relación entre poesía y pintura surgió por la influencia de la literatura sobre la pintura.